En el dinámico mundo actual, aprender a hacer más cosas en menos tiempo es clave para el desarrollo personal y profesional. Las personas efectivas y exitosas tienen varios hábitos en común. Y lo mejor: tú también puedes desarrollarlos.
Te compartimos algunas de las cualidades que te ayudarán a ser más efectivo en tu día a día:
1. Decirle ‘no’ a las distracciones. Siempre.
Las personas exitosas saben usar mejor su tiempo porque son disciplinadas y saben establecer sus metas. También hablo de esas personas que no tienen momentos bajos; sí, hay tiempo para las vacaciones y para la familia, pero saben cómo balancearlo y no se dejan tener momentos improductivos.
Para ser altamente efectivo necesitas aprender a concentrarte y evitar las cosas que te distraen (como tus gadgets, los ruidos, las conversaciones en chat, las redes sociales o los emails). Seguramente habrá cosas que no disfrutes hacer, pero sabes que las tienes que terminar. Por ello, ser organizado y disciplinado es esencial.
2. Leer algo nuevo todos los días
Las personas exitosas y creativas leen constantemente, y encuentran mentores que les enseñan, valorando toda la información que reciben y pueda servirles en un futuro. Además, el hábito de la lectura ayudará a incrementar tu comprensión, imaginación, capacidad sintética y otras habilidades como la ortografía y gramática.
3. Aceptar tus errores y sigue adelante
Fracasa cuantas veces sea necesario. Todo el mundo fracasa de vez en cuando; es parte de la vida. Pero cuando lo hagas, no renuncies ni pierdas el tiempo. Lo que separa a la gente exitosa de la ordinaria es la habilidad de levantarse y empezar de nuevo una y otra vez, con un mejor plan para triunfar
También debes aprender a aceptar que no existe la perfección. Así que no pierdas tu tiempo buscándola.
4. Levantarte temprano
Las personas más proactivas y efectivas suelen madrugar. Al aprovechar las mañanas de mejor manera podrás terminar tus cosas a tiempo, así como tener horas para ejercitarte, trabajar y estar con tu familia.
5. Seguir la regla 80/20
Muchos emprendedores cometen el error de intentar dedicar su tiempo a atender todos los asuntos. Sin embargo, es importante que entiendas que, al igual que en las ventas, el 20 por ciento de tus acciones te producirán el 80 por ciento de tus resultados. Por ello es clave que establezcas prioridades y trabajes en las cosas que te generan más dinero o mayores oportunidades para el futuro.
La famosa regla de Pareto dice que el 20 por ciento de tus acciones te producirán el 80 por ciento de tus resultados.
6. Cuidar tu cuerpo
El cuerpo es la máquina que nos permite ejecutar y trabajar; y como cualquier máquina, requiere de mantenimiento. Para tener buenos niveles de energía y un buen estado físico (que conlleva a uno mental) es importante que: cuides tu alimentación, tratando de consumir proteínas y mucha agua, y de reducir los alimentos procesados; hagas ejercicio al menos 30 minutos al día, y estiramientos cada hora; e intentes dormir bien, intentando irte a la cama temprano y relajándote para conciliar un buen sueño.
7. Aprender a delegar
Éste es un punto especialmente difícil para los emprendedores que tratan a su negocio como su “bebé”. Debes entender que no puedes hacer todo por ti solo y que necesitas confiar en los demás para completar tus tareas y alcanzar tus objetivos. Una persona verdaderamente efectiva sabe rodearse de gente talentosa, que puede cumplir algunas responsabilidades incluso mejor que él mismo.
8. No acumular pendientes
Tener tu agenda llena o tu escritorio cubierto de post-its con pendientes es una señal de que estás procrastinando y dejando todo para después. Aunque es importante que definas prioridades, intenta cumplir con ciertas tareas en el momento. Esto te evitará preocupaciones mentales que sólo te desconcentran y distraen de lo importante.
9. Identificar cuándo alejarte
Aunque las personas altamente efectivas destacan por trabajar con rapidez y atención, también es importante saber cuándo tomarte un respiro y alejarte momentáneamente del trabajo. Esto te permitirá recuperar el enfoque, refrescar la mente y evitar los estancamientos de creatividad y productividad.
10. Definir metas
Las personas efectivas tienen bien establecidos objetivos en el corto, mediano y largo plazo. Incluso en una base diaria. Cada día fíjate nuevas metas que te reten y te mantengan motivado. Por ejemplo, para hoy podrías proponerte hacer 10 llamadas a nuevos clientes y 5 a clientes actuales. La idea es que tú mismo te pongas como propósito ser más efectivo cada día.